7 de noviembre de 2011

No monopolices todas las decisiones

La creencia popular sostiene que es mejor tomar una decisión rápida que no tomar ninguna decisión, después de todo, siempre existe la posibilidad de cambiar de dirección y revertir la decisión tomada inicialmente.

Muchas veces, en un esfuerzo por proyectar la imagen de ser “determinado”, el líder puede presionar a sus empleados a tomar decisiones prematuras y muchas veces si el subordinado no toma una decisión clara y rápida, el jefe toma la decisión por él.

Si los líderes insistimos en tomar nosotros las decisiones porque “sólo nosotros sabemos cuándo y cómo se deben hacer las cosas”, muy pronto la gente deja de participar con sus ideas porque asume que de todas maneras su jefe ya sabe lo que quiere y “no importa lo que yo diga”.

No estamos abogando aquí en que como gerente o líder no participes en la toma de decisiones ni estamos diciendo que no revises las decisiones de tus subordinados, pero si te animamos a que en lugar de tomar las decisiones por ellos, les acompañes con respeto en el proceso de toma de decisión para que entiendan el proceso que puede ayudarles a tomar mejores decisiones y más rápido.

Por supuesto que es más fácil y más rápido que tú tomes las decisiones, pero estarás perpetrando una cultura centralizada que a la larga no permitirá capitalizar las ideas de las personas que te rodean y limitarán entonces el desarrollo de tu organización al convertirte en el cuello de botella de lo que debe pasar en la empresa.

Es momento de que te conviertas en mentor, en lugar de solo tomar una decisión, explica porque crees que es la mejor decisión y a partir de ese momento, delega ese tipo de decisiones a la persona correcta. La próxima vez dejas que la persona tome la decisión y revisas con él o ella la forma en que arribó la decisión, para estar seguros de que ha aprendido el proceso y obtenido buenos resultados.

Es asombroso lo que puede suceder con tu organización cuando como líder puedes pasar de corregir a enseñar, no es lo mismo corregir la forma en que un empleado hizo una transacción a enseñarle como se debe hacer la transacción, tomate el tiempo, es una buena inversión.

¿Qué tipo de decisiones puedes delegar a alguien hoy? ¿Qué vas a hacer para enseñarle a esta persona la forma en que esperas que tome esas decisiones?

El consejo de administración de hoy fue adaptado por Consultoría Aplicada de “¿Como cultivar empleados comprometidos?” por Charalambos A. Vlachoutsicos.